y llega el verano...

sí, se acerca el verano y ya empezamos a buscar actividades que cumplan todos los requisitos posibles, para que nuestros pequeños estén a la vez cuidados, ocupados, que no les supongan la continuación del cole, pero que sin embargo les aporte...  Como cada año, la búsqueda supone un boca a boca continuo, donde valoramos sobre todo su seguridad, que no suponga un coste económico imposible, y a la vez que nuestra tranquilidad sea absoluta.   Como cada año,  el tema supera incluso las vacaciones estivales, siendo en muchos casos, el mío por ejemplo, en el que primo dichas actividades al posible disfrute de un merecidísimo viaje, dado que éstas actividades no suponen un "capricho" estival, sino una simple y absoluta necesidad.  

Si sumamos las vacaciones anuales medias de una pareja, nos encontramos que en la mayoría de los casos no superan los 60 días anuales.  Aún en el supuesto caso de que se distribuyan adecuadamente esos 60 días, es del todo imposible que cubran los mas de 3 meses anuales de vacaciones de nuestros pequeños. Los malabarismos que tenemos que hacer para que dichas vacaciones nos cunda hacen que las estiremos al máximo pero, por supuesto es imposible cubrirlas.  En mi caso, al ser familia monoparental, este problema se duplica por lo que es del todo inevitable ocupar gran parte de esas vacaciones con actividades extraescolares que, además, suponen una nueva carga a nuestra maltrecha  economía familiar.  Se habla de conciliación laboral, los sindicatos pelean por dicha concilicación cada vez que se habla de las elecciones sindicales, cuando se acerca el día de la mujer trabajadora,... pero no hay ninguna propuesta.  Estamos, en la mayoría de los casos, sindicados, pagando una serie de cuotas anuales que no van a parar a ningún lado (visible al menos), y todavía no conozco a nadie que haya propuesto desde dichos sindicatos regular actividades estivales (y no tan estivales si pensamos en las vacaciones de Semana Santa, Navidades, semana blanca, etc., etc., etc., ) Aquí cada cual que se busque sus sardinas, y se avíen con lo que puedan... por Dios....

  Pero insisto, ésta no es mi mayor preocupación.  Al hecho de que dichas actividades son casi inexistentes, sobre todo en el mes de agosto, lo que supone una precariedad de plazas, que sin un tiempo suficiente en la previsión, supone la pérdida de dichas plazas, además hay que añadir la carestía de las mismas.  Es por ello, por lo que cada año, es a partir del mes de Abril cuando se abre la veda en busca de la mejor, la mas interesante,  la idónea, la inigualable... actividad estival, utopía imposible de conseguir, pero que estamos constantemente buscando.

Me gustaría que aportaran ideas, actividades conocidas, y que además cuenten con una valoración positiva.  Yo, a lo largo de este y el próximo mes iré aportando todas aquellas que lleguen a mis manos.  Espero que aunando esfuerzos podamos consiguir este año que las vacaciones no sean una tortura mas en el día a día familiar.